lucia un sol fabuloso detras del muro

Estoy en la celda, aburrido, algo amodorrado, hace tiempo que deje la biblia en la mesilla para dedicarme de lleno a la espera, hasta mí llegan los ecos frios de mis compañeros que, cuando se aburren, se dedican a expandir sus instintos y sus chascarrillos a lo largo de la galeria, llega desde otro lado del penal una dulce melodia, alguien silba una canción infantil que reconozco bien, "el lirio rojo", me transporto a traves de la tonadilla, obviando el jaleo y las pareces hasta mi infancia, recuerdo las tardes despues del colegio, cuando llegaba a casa y mi madre me daba un bocadillo... una pareja de guardias nos llaman a cenar, todo se acaba, todavia luce el sol, son las seis de la tarde, deberia ser la hora de la merienda, haya lejos, tan lejos.