Gotas.

A gota por segundo,
en una hora tendré un charco,
charco que será charca
cuando se multiplique por
veinticuatro.
Gota a gota, ya es verano:
Me iré a bañar en mi lago.
¡Que fresquita que esta el agua,
que agustito aquí, en mi lago!
Cuando se me empieza a arrugar la piel
de tanto chapotear,
intento salir de aquel
para ponerme a secar.
El lago mio se desborda
y cae por un terraplén, regando
de sol a sombra
lo que arrasa sin querer.
En un principio no quiero
deslizarme sin parar, pero
es el río de mi vida, entiendo
y me pongo a bucear.
Ensimismado, acostumbrado ya,
de pronto no se que pasa:
esto parece un mar.
El río ha desembocado
la muerte ha llegado ya,
esto me asusta un poco;
yo no soy hombre de mar.
" por supuesto que lo eres, chico"
dice una voz familiar.
yo, no comprendo nada
y me empiezo a acojonar.
"¿por que lloras hijo mio?,
¿no comprendes que al final,
no eres más que un poco de agua,
que no eres nada más?".
"Yo tengo cuerpo" ,respondo
y empiezo a patalear,
mas mis piernas no se mueven,
para mi asombro:
solo hay agua y nada mas.
soy una gota salada
en medio de un enorme mar,
ya no tengo que hacer nada,
solo dejarme llevar.
Poco a poco, sin remedio,
me he empezado a disipar.
Adiós conceptos y memoria,
no os necesito ya.
Calma inmensa.
Confiado.
Es océano, no mar.